Los órganos fabricados con impresoras 3D ya son reales
Los tejidos y órganos humanos realizados en impresoras 3D tendrán muy pronto la suficiente calidad como para ser utilizados en transplantes. Los mismos serían una solución al problema de escasez de donantes.
Según informó la revista Nature Biotechnology, un equipo de científicos de medicina regenerativa en Estados Unidos, ha demostrado en una investigación que es posible imprimir tejido vivo, cartílagos y huesos para colocarlos en el cuerpo de pacientes gracias a una nueva tecnología para impresoras 3D que utiliza células madre y polímeros especiales.
Por el momento las partes impresas han sido probadas únicamente en animales. Sin embargo, los investigadores aseguran que los resultados preliminares demuestran que las piezas tienen el tamaño y el funcionamiento adecuado como para ser utilizadas sobre pacientes.
Uno de los principales obstáculos para crear órganos a partir de células madre es que solo pueden ser impresas en una capa fina. Cuando el grosor de la capa de las células supera los 200 micrómetros, el tejido comienza a morir, porque los nutrientes y el oxígeno, a falta de vasos sanguíneos, no consiguen penetrar a esa profundidad.
Los autores de la investigación han logrado resolver este problema. Mediante la creación de un polímero especial que permite crear capas celulares, dejando un pequeño espacio entre ellos, los científicos consiguieron que las células del futuro hueso crezcan de manera ilimitada, sin experimentar problemas con el acceso a los alimentos y el oxígeno.
Una vez impreso, el órgano es colocado en el cuerpo en donde poco a poco es cubierto con vasos sanguíneos, mientras el polímero se descompone.
"Esta nueva impresora de órganos y tejidos es un avance importante en nuestro trabajo. Con esta impresora se puede fabricar tejido humano resistente y de cualquier forma. Con un mayor desarrollo, esta tecnología podría ser utilizada para imprimir órganos para su implantación quirúrgica", explicó Anthony Atala, doctor que lideró la investigación.