La crisis financiera, "descontrolada", puede ocasionar pánico
"Tenemos una situación de incertidumbre y temor", afirmó Carlos Fedrigotti, MBA en Finanzas por la School of Business de la Columbia University y ex director general de Citigroup. Señaló que la crisis financiera mundial, descontrolada, puede "poner en juego la viabilidad y solidez" del sistema bancario y causar pánico. Agregó que en el sistema financiero internacional "hay elementos de exceso y "tomas de riesgo imprudentes e irracionales que pueden parecerse a un casino". Sobre cómo impacta esto en Uruguay, el profesor de "Finanzas de Instituciones Financieras" resaltó: "Un Estados Unidos menos pujante y golpeado afecta nuestra capacidad de exportar" y la recaudación del gobierno.
EMILIANO COTELO:
En las últimas dos semanas y sobre todo en ésta hemos asistido a un recrudecimiento de la crisis financiera internacional, en un escenario que cambia prácticamente a cada minuto.
El lunes, cuando la Cámara de Representantes de Estados Unidos rechazó el plan de rescate financiero de 700.000 millones de dólares, parecía que el mundo se caía, con las bolsas desplomándose y con los precios del petróleo y los commodities cayendo fuertemente.
Sin embargo, después de ese nuevo "lunes negro", ayer primó la esperanza de que el plan se rediscuta y finalmente se apruebe. Eso llevó al alza a las bolsas de Europa, dentro del propio Estados Unidos y también en América Latina.
Mientras eso sucede en los mercados, en el mundo de las finanzas varios bancos ven que se producen decisiones como por ejemplo las nacionalizaciones. Varios bancos deben nacionalizarse para no quebrar o acuden a préstamos de último momento. Mientras tanto otras instituciones financieras, que parecen emerger fuertes, compran a otros bancos que no pudieron hacer frente a la exposición que tenían a los créditos hipotecarios de alto riesgo, créditos "tóxicos".
¿Por qué está trancado el plan de salvataje de la administración Bush? ¿Qué va a pasar con el mundo financiero? ¿Ha cambiado para siempre? Y en este panorama que resulta tan variable, ¿qué puede esperarse que ocurra con las economías a nivel global? En fin, vamos a volver sobre estos temas en los próximos minutos.
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EC Para eso recibimos esta mañana a Carlos Fedrigotti.
Carlos Fedrigotti tiene un MBA en Finanzas por la School of Business de la Columbia University y en Uruguay se lo recuerda muy bien, porque fue director de Citigroup entre 1990 y 1995, luego, entre el 96 y 2001, fue director general de Citigroup Argentina y en el año 2002 Citigroup Italia. Hay que agregar que durante el período 2000-2001 también fue ejecutivo responsable de las operaciones de Citigroup en Uruguay y en Paraguay.
¿Qué actividades has desarrollado en los últimos años?
CARLOS FEDRIGOTTI:
Como bien dijiste, yo tuve una larga trayectoria con Citibank, sobre todo en mis últimos años aquí en la región. Mi último año fue en Italia y en 2003 me retiré del banco, me radiqué en Nueva York y me estoy dedicando un poco a la docencia y a actividades privadas de asesoramiento a empresas en temas estratégicos de finanzas.
EC ¿Dónde ejerces la docencia?
CF En mi propia Universidad de Columbia, donde enseño un curso en Banca Internacional. A partir de ahí, la Universidad de Montevideo me invita un par de veces al año y doy unas clases también en el programa de Master en Finanzas, que es un programa excelente que tiene la Universidad de Montevideo, preparando chicos jóvenes que tienen mucho entusiasmo y compromiso con la sociedad y enviando el tema de cuál es el papel que ellos pueden jugar con el conocimiento del tema financiero.
EC ¿Y cómo evalúas, desde la experiencia de años en el propio sistema financiero y ahora desde este otro tipo de responsabilidad, lo que está pasando en este momento? Por ejemplo, ¿cómo observa alguien con tu historia un plan de rescate como éste que está preparando la administración Bush y discutiendo con el Congreso, y que alcanza la cifra de 700.000 millones de dólares?
CF Yo creo que para entender cómo interpretar el rescate y el por qué, me parece ponerlo en el contexto del ambiente que se está viniendo y cuáles son los acontecimientos de los últimos meses que han resultado en esta gran crisis de confianza, de temor, de incertidumbre y preocupación, que, descontrolada, puede volverse un pánico y poner en juego la viabilidad y la solidez no sólo del sistema bancario, sistema financiero, sino que también puede llegar a trasmitirse en forma violenta al sector real de la economía.
Así que tenemos una situación de incertidumbre, de temor y hay ciertos momentos en que los reguladores, el gobierno, tienen que intervenir para calmar los ánimos y para devolver un poco de la sensación de confianza, para que el sector financiero pueda continuar jugando el papel central que juega en el mecanismo del sistema económico.
El sistema financiero viene a tener un cordón umbilical con la economía real a través del mecanismo de extensión de créditos. Cuando el sistema financiero no está ejerciendo ese papel de una manera eficaz y eficiente, tiene consecuencias negativas sobre el resto del sistema económico.
Así que el sistema de créditos, que en este momento está paralizado, es necesario volver a construirlo.
EC ¿Y de qué manera se planea hacerlo? ¿Qué es este plan de salvataje? ¿Estamos hablando de una compra de carteras al estilo de la que conocimos acá en Uruguay después de la crisis del 80-82?
CF Sí, el término en Uruguay tiene connotaciones peyorativas, pero es correcto en el sentido de que el Estado compra cartera que no está cumpliendo, pero que se asume que en este momento el valor de esas carteras está siendo artificialmente impactado en exceso, de modo de que los bancos no tengan que descargar estas carteras para generar liquidez y al hacerlo en forma acelerada generen pérdidas que afecten su nivel de capital y hagan a los propios bancos insolventes. Hay momentos en los cuales es importante que el Estado tenga atributos para intervenir de esta manera, para aliviar esa presión.
EC Esas carteras son pesadas, ¿por qué?
CF Esto está basado en la génesis del problema y de cómo llegamos aquí. Estas carteras se originaron a partir de 2002, sobre todo con la caída muy rápida que hubo de la tasa de interés, causada, a su vez, por la necesidad de la Reserva Federal de amortiguar la caída que en aquel momento estaba empezando a ocurrir en la economía americana; tuvimos dos golpes: la burbuja de internet de la compañía.com, en abril del año 2000, que tuvo también un impacto en el sistema financiero, y el ataque a las Torres Gemelas y al Pentágono en setiembre de 2001.
A partir de ahí, la Reserva Federal utiliza su herramienta monetaria para devolver el nivel de actividad, bajando las tasas, que lentamente ha traído un exceso de acceso al crédito que se ha convertido en un exceso de imprudencia en inversiones en el sector inmobiliario que ha retroalimentado una burbuja.
Y una sensación de riqueza y de prosperidad infinita, cuando el valor de las casas se volvían una especie de cajas de ahorros de la cual siempre seguir sacando plata, porque los bancos te prestaban contra lo que valía tu casa o contra lo que valía tu cartera de inversiones en la bolsa, que también estaba sufriendo una mini burbuja como consecuencia.
Así que tenés una extensión de créditos exagerada, basada en valores que ahora sabemos que llegaron a ser artificiales e irreales y que hoy en día nos damos cuenta que la gente no está cumpliendo con esas obligaciones y eso es lo que afecta el valor de estas carteras.
Perdón que te esté dando una explicación tan larga, pero estoy intentando abarcar mucho en poco tiempo.
EC El gobierno de Estados Unidos va a comprar esas carteras pesadas que tienen los bancos. ¿Qué significa esa operación?
CF Aquí cuando se hizo compra de carteras se cambió la cartera que tenían los bancos al sector privado por bonos del Estado, de modo que los bancos cambiaron su deudor, que antes era el sector privado, el sector agropecuario, de la construcción, etcétera, y pasó a tener al Estado como principal deudor.
En el plan de Estados Unidos yo creo que ésta no es la situación o lo que está previsto.
EC ¿Cuál es el mecanismo?
CF Esencialmente compra con efectivo. Yo no he escuchado que se esté hablando de un simple canje de deuda. De todos modos, lo único que hace es que al marcar en tus activos el valor de esos títulos, de esos instrumentos, estás o poniendo efectivo o poniendo bonos del Estado que cotizan a la par. Así que sí, efectivamente, es una compra de carteras presumiblemente a cambio de efectivo.
EC ¿Y eso qué implica para los bancos que tienen esas carteras?
CF El alivio de saber que la caída, la espiral no contenida de la falta de confianza, encuentra una especie de piso y le pones un número a cuánto es que tenés que reconocer como pérdida en el valor de estas carteras inmobiliarias, que, fruto de una burbuja de valores artificiales, no hay nadie en este momento que sepa ponerle un valor técnicamente correcto.
EC - ¿Qué se supone que va a pasar con el sistema financiero a partir de una compra de carteras como ésta?
CF Entendamos que la compra de cartera es la medida no lo sé- número cinco o número seis. La Reserva Federal y el gobierno del Tesoro de Estados Unidos han intentado resolver esto a través de medidas incrementales de naturaleza monetaria y fiscal, que ha sido la extensión del crédito prestamista de última instancia, que es lo que le corresponde hacer al Banco Central, en algunos casos, y en otros casos directamente el rescate de algunas instituciones o la nacionalización en el caso de Freddy y Fannie Mac y de AIG. En este caso, han dejado incluso que se cayera un banco de inversión como Lehman y han obligado a que otros fueran absorbidos y fusionados y negociada esa venta y esa fusión en condiciones de debilidad, por lo que los accionistas de todas estas instituciones han tenido unas pérdidas muy grandes.
La pregunta es cómo proteger a los depositantes normales en algunas de estas instituciones, sobre todo en el sistema bancario, de modo de no generarle a ellos también un perjuicio. Y ahí la medida abarcativa a la cual se ha llegado, porque veían que el caso por caso no estaba funcionando, que hacían algo, apagaban ese incendio pero el incendio surgía en otro lugar, ha sido esta medida de los 700.000 millones de dólares. Si sumás los pedazos de todo lo que se ha venido haciendo, estamos hablando de más de 1.000.000 de millones de dólares, que es la intervención del Estado hasta ahora.
EC Y al Congreso de Estados Unidos le cuesta aprobar un plan de salvataje como este.
CF Definitivamente, el momento político de los Estados Unidos preelectoral es extremadamente complicado.
EC Y se suman una serie de razones, ¿no? Está el pase de facturas entre partidos, está la inminencia de las elecciones, que en el caso de la Cámara de Representantes implica la renovación total, cosa que no ocurre en el Senado; pero cada uno de estos legisladores va a tener que dar cuenta ante la ciudadanía, ahora nomás, de lo que vote. Ese es un factor que, evidentemente, tiene su peso. Están los problemas ideológicos de los republicanos, para aceptar una intervención del Estado de este porte en el sistema financiero. Y está también la sensación de que se está destinando una suma muy alta de dinero de los contribuyentes a asistir a Wall Street y no a los ciudadanos comunes y corrientes. ¿Cómo ves tú este tipo de razones que se están cruzando en este debate?
CF Yo creo que es correcta tu descripción de los muchos factores que están interviniendo en este momento, de las distintas visiones que hay de lo que está pasando. Creo que es desafortunado, de todos modos, que en esta coyuntura política se debatan cosas que vienen a ser tangenciales y que no hacen a la esencia de la solución. Es un momento en el cual hay que estar tomando decisiones. Las decisiones por naturaleza tienen que ser tomadas de forma rápida y eficaz, pero este es el momento en el que estamos. Hasta ahora venían tomando las decisiones desde la Reserva Federal, (Ben) Bernanke y (Henry) Polson, desde el Tesoro, de una manera bastante ejecutiva, utilizando todos los poderes que el Congreso les había delegado.
Para este paquete de 700.000 esto entra en un debate en escena, bajo cámaras de televisión y que se presta al teatro y a la demagogia y a las versiones tergiversadas; y sobre todo a la búsqueda de culpables, que es necesaria y que será buena, y hacer un buen diagnóstico de por qué pasó lo que pasó, para poder lograr poner un mecanismo de medidas para evitar que vuelva a pasar. Todo este debate debería tener una secuencia correcta y me parece que intentar ahora hablar de quiénes son los culpables sería una pérdida de tiempo y una contribución a la incertidumbre de la gente.
EC Pero, en particular, la contradicción en la que terminan incurriendo los republicanos, ¿cómo la observas?
CF Sí, aquí hay temas filosóficos e ideológicos de fondo que deberían ser debatidos en un ambiente sereno y que están siendo un pasaje de facturas. Hay ocho años de una administración republicana que es extremadamente impopular y que los demócratas, obviamente, van a insistir en que se hagan cargo del costo político de lo que hay que hacer en este momento.
Cuánto tiempo se toman en ese ajuste de cuentas y en el "yo te dije que estabas mal", etcétera, etcétera. Me parece que ahí estamos todos con la ñata contra la ventana mirando a ver en qué momento se ponen las pilas y resuelven que primero hay que hacer lo primero y después lo que hay que hacer después.
EC ¿Eso es lo que hay que hacer? ¿No se puede dejar caer esos bancos lisa y llanamente?
CF No, yo creo que hay consenso en que esto tiene que ser hecho, pero la pregunta de fondo, naturalmente, es cómo se reparten los costos de esto que ha pasado hasta ahora.
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EC En estas horas hubo una reunión de los presidentes de Brasil, Venezuela, Bolivia y Ecuador, donde criticaron al sistema financiero internacional y a Estados Unidos por esta crisis. Hubo distintas declaraciones, por ejemplo la del presidente Lula, que denunció que el sistema financiero internacional se convirtió en un casino en el que las personas apostaban a ganar dinero fácil sin ninguna responsabilidad. Agregó que las instituciones que pasaron las últimas tres décadas diciendo lo que nosotros debíamos hacer no se lo aplicaron a sí mismas. ¿Cómo observas este tipo de críticas?
CF Está bien, tiene elementos de la realidad que son innegables. Me parece, de todos modos, que esa forma de analizar el tema no ayuda a construir la solución y si uno no tiene un buen diagnóstico de lo que ha pasado, no ayuda a enfrentar los posibles problemas del futuro. Así que podemos todos estar en este momento dando un grito al cielo, pero lo importante es entender bien el fondo de esto.
EC ¿Pero el sistema era una casino?
CF Hay elementos, obviamente, de exceso en tomas de riesgo imprudentes e irracionales, que pueden parecerse a un casino. Por ejemplo, Greenspan ha descrito muy bien que un buen sistema financiero está basado en un buen equilibrio entre la codicia, que es la que hace que los seres humanos inventen cosas y tomen riesgos cada vez mayores, porque buscan rentabilidad, y un buen equilibrio con el temor, el miedo, que es lo que hace que se eviten excesos en el tema de la codicia. Entonces, todos necesitamos un buen equilibrio entre estos mecanismos. Cuando uno de los dos se desequilibra, cuando el sistema funciona e incentiva la codicia, porque los mecanismos de control que da el miedo no están funcionando bien, tenemos situaciones como ésta.
Ahora, entendamos también cuando se dice quién estaba en el casino, quién estaba en esta fiesta y en esta borrachera irresponsable. Es fácil decir "son los banqueros", pero no nos olvidemos lo que ha hecho la burbuja inmobiliaria también: dar créditos en forma ligera e irresponsable, a gente que a veces ni se le pedía evidencia de sueldos, basados en valor-préstamo o valor-casa y mal hechos, artificiales. Esto ha "beneficiado" a toda la sociedad en el sentido de que ha habido una pujanza de consumo y desarrollo, que ahora todos vemos que estaba construido sobre bases falsas.
Este consumo y crecimiento que ha hecho que la locomotora de la economía americana tironee del resto de la economía global, atrás venía el resto del mundo también, China vendiendo sin cesar su producción a los Estados Unidos; China consumiendo productos que vienen, por ejemplo, de nuestra región. Así que veníamos todos colgados de esta burbuja de consumo basada en el crédito, que en ese momento necesita una corrección y un ajuste.
Así como yo creo que indirectamente esto nos ha hecho partícipes o co-dependientes a todos, "beneficiarios", entendámonos bien, hace que todos seamos impactados por lo que está pasando.
EC ¿Cuáles son las consecuencias posibles en una región como ésta, acá en Uruguay, por mencionar este ejemplo que es el que más nos interesa?
CF Decíamos que el mecanismo de transmisión de los problemas en el sistema financiero a la economía real es el de la extensión del crédito. En Estados Unidos este sistema está paralizado. Definitivamente se vuelca a la economía real; cuando no hay créditos no hay consumo y no hay inversión. Yo me estoy imaginando que es inevitable que haya una recesión más profunda en la economía de los Estados Unidos, lo que también, a mi juicio, de manera inevitable, se trasmite si Estados Unidos no consume y no demanda- a aquellos que viven de producir para vender a Estados Unidos. Así que a través de lo que le pase a China e India nos va a llegar también a los precios de los commodities y por lo tanto a los que abastecemos al mundo de este tipo de productos. Y hemos también tenido un crecimiento económico extraordinario en los últimos cinco o seis años, basado en esa cadena de eventos. Así que eso nos llega aquí, yo diría que de forma inevitable.
EC El argumento que reiteradamente se escucha acá en nuestro país, por ejemplo, pero también en los países de la región, es que está complicado el escenario internacional, pero estamos mejor plantados que ante crisis anteriores. Hemos, por ejemplo, sido más disciplinados en materia fiscal, tenemos nuestras cuentas mejor ordenadas. ¿De qué manera pesa en ese tipo de factores?
CF Todo eso es cierto y es muy importante como punto de partida. Creo que también hay que entender que probablemente lo mejor ya pasó y a partir de ahora tenemos que prepararnos para tiempos más complicados. La intensidad de la onda expansiva todavía nadie puede decir cuánto va a ser, pero lo único que sabemos es que va a ocurrir. Así que hay posicionarse y tomar medidas de protección para evitar que esto pueda ser más dañino de lo necesario.
EC ¿Pero de qué tipo de medidas estamos hablando?
CF Decimos que los flujos de capital norte-sur van a ser afectados negativamente porque hay una fuerte restricción de crédito, además porque el capital financiero del norte que tiene muchos problemas que resolver todavía, pérdidas que tomar, etcétera, va a estar muy ocupado en esa tarea de limpieza y va a encontrar oportunidades de inversión en el norte, porque también hay un exceso en este momento de negativismo que va a hacer que haya oportunidades. Si esos capitales en este momento se van a concentrar en el norte, el flujo va a ser afectado, tal vez incluso, interrumpido. ¿Qué significa? Que el acceso a financiamiento incremental yo diría que va a ser casi no existente, que la capacidad de refinanciar lo que ya debemos va a ser más difícil y que la tasa de interés definitivamente va a subir, así que tenemos que incorporar a nuestros cálculos, en el presupuesto familiar y nacional, el impacto de una suba de la tasa de interés y una dificultad de renovar nuestras obligaciones.
EC Pero eso no va a ocurrir a corto plazo: el gobierno menciona con frecuencia que tiene ordenado el programa de vencimientos hasta el año 2010.
CF Es cierto que hay un alivio en la extensión de los plazos, pero hay cosas que vencen y que hay que prever a qué tasa de interés se va a estar renovando. Además, todo lo que tenga tasa de interés variable creo que definitivamente va a sufrir un impacto.
Así que vamos a ver el impacto aquí no solamente por la cuenta de capital de la balanza de pagos, sino también por la cuenta corriente. Un Estados Unidos menos pujante, golpeado, para ponerlo con un ala quebrada, creo que afecta nuestra capacidad de exportar y la capacidad del gobierno de recaudar, lo cual también perjudica las cuentas públicas...
EC ¿Las economías emergentes como China, India, Rusia no se desacoplan de la crisis económica?
CF Me parece que ese es un supuesto falso, que no funciona de ese modo. Yo estoy convencido que China va a ser golpeada por la caída de la actividad económica de la demanda de los Estados Unidos.
EC ¿Qué se puede prever con respecto al sistema financiero? Porque estos días distintos analistas han dicho que el sistema financiero ya no será como antes. ¿Qué tipo de cambios se prevén?
CF La industria venía en una mega tendencia de consolidación y de orientación hacia el modelo de banca universal, que es el banco que hace todo tipo de productos financieros con los sectores del mercado, de la población, empresas, familias, personas, y en todo tipo de geografías: esa es la definición de banco universal. Ese proceso en este momento se está intensificando, porque empiezan a desaparecer instituciones fusionadas. Esperemos que en algún momento nos puedan demostrar que son más sólidas, lo que sería un beneficio para todos.
Lo otro que está desapareciendo es el modelo de banca de inversión independiente, que en este momento se ha demostrado que los niveles de apalancamiento a los que ellos llegaban, que el hecho de no haber sido supervisados por la Reserva Federal con la misma intensidad que ésta supervisaba los bancos comerciales, no es viable y en los bancos de inversión estas actividades están siendo absorbidas por los bancos comerciales.
Así que vamos a tener menos bancos, más grandes, y esperemos que mucho más sólidos.
EC ¿Y en cuanto a la regulación? Parece bastante claro que vamos hacia un sistema más regulado.
CF Lo que está pasando debería tener consecuencias en cómo regulamos a los bancos. Va a haber más regulación. Creo que el arte de ese trabajo va a depender en saber lograr los equilibrios justos, en poner controles, supervisión, nuevos ratios de capitalización de los bancos, que sean contra-cíclicos y no pro-cíclicos. Hay toda una artillería de medidas que se están discutiendo, pero sin matar la capacidad de los bancos de inventar ideas que a la larga les resuelvan los problemas a las empresas y a las personas físicas. Podemos controlar algo con tanta intensidad, que sofocamos su capacidad de innovar y de avanzar. Así que el arte de lograr esos equilibrios me parece importante. Creo que tenemos que apoderar a los reguladores, pero también ser realistas en lo que podemos esperar de ellos. Esperar que sean magos y que puedan detectar este tipo de burbujas y que las puedan pinchar antes que se vuelvan un problema no controlado, me parece que es esperar demasiado de un grupo humano, porque es una tarea muy difícil.
Lo otro que también me parece difícil de lograr es darles la misión de que cuando, aparentemente, todas las señales de la economía son que este mundo se ha vuelto color de rosa y todo va bárbaro, los bancos empiezan a prestarle a sectores de la población más necesitados, que están por primera vez teniendo acceso al crédito, a la hipoteca, a la compra de una casa; en ese momento de "euforia" que el regulador diga "señores dejen de prestar, porque pienso que aquí potencialmente estamos creando una burbuja", porque las presiones políticas en ese momento contra el regulador van a ser enormes porque a nadie le gusta interrumpir la música.
Así que, todos estos equilibrios son extremadamente delicados. Hay que hacerlo bien, pero sobre todo hay que hacerlo con la cabeza fría y con un buen diagnóstico de qué pasó, por qué pasó, cómo repartimos los costos, cómo vamos hacia delante y cómo armamos un mecanismo, una red de protección para evitar excesos sin matar la innovación y la toma de riesgos.