Las razones del fuerte crecimiento de la economía uruguaya
Análisis del contador Alfonso Lema, socio de Tea Deloitte & Touche.
(Emitido a las 8.25)
EMILIANO COTELO:
Como ustedes saben, la economía uruguaya continuó creciendo fuertemente en el segundo trimestre de este año. En concreto, El PBI subió 8,4% en la comparación enero-junio de 2006 frente al mismo período del año pasado.
Ya estuvimos analizando esas cifras el martes, pero hoy les proponemos detenernos en el comportamiento de la demanda. ¿Qué está sucediendo con las exportaciones? ¿Cómo se está comportando la inversión? ¿Qué incidencia ha tenido el repunte del consumo privado? Enseguida, ese es el tema con el contador Alfonso Lema, socio de Tea Deloitte & Touche.
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Alfonso, antes de entrar de lleno en el tema de hoy, te propongo que repasemos las principales conclusiones del análisis que hacíamos con ustedes el martes.
ALFONSO LEMA:
Tú decías que la actividad económica, medida por el Producto Bruto Interno (PBI), creció 8,4% en el primer semestre de este año en relación al mismo período del año anterior.
Eso está marcando una aceleración de la actividad económica, que había crecido un 6,6% en el conjunto de 2005. Ese mayor dinamismo de la producción obedece, fundamentalmente, a lo observado en el segundo trimestre, cuando el PBI mostró una suba de 3,5% en términos desestacionalizados en relación al primer trimestre del año. En el dato del segundo trimestre está la explicación de esa aceleración de la actividad económica.
EC - ¿Cuáles fueron los sectores más dinámicos?
AL - El sector más relevante para explicar la suba del PBI en el primer semestre fue la industria manufacturera, con un incremento de 21% y una incidencia directa sobre el PBI de 3,8%. Eso quiere decir que de los 8,4 puntos de aumento del PBI, 3,8 se explican por la industria.
Luego le siguieron la construcción y el transporte y comunicaciones, con subas de 13,4% y 10,7%. Aunque la expansión fue generalizada, ninguno de los siete grandes sectores que componen el PBI mostró un descenso en el primer semestre del año.
EC - Ahora, ¿cuál es la lectura que se hace de las cifras desde la perspectiva de la demanda agregada?
AL - En primer lugar, la demanda agregada subió un 10% en términos reales. Subió más que la producción nacional (que el PBI) y eso es así porque las importaciones de bienes y servicios subieron un 13,4%.
Al interior de la demanda agregada, se observó un dinamismo importante tanto de la demanda interna como de las exportaciones, aunque las exportaciones subieron un poco menos que la demanda interna.
EC - ¿Cuánto subieron las exportaciones?
AL - Subieron un 8% en términos reales, gracias exclusivamente a mayores exportaciones de bienes porque las exportaciones de servicios bajaron debido a los malos resultados que tuvimos durante la temporada turística (con menos ingresos de visitantes y menor gasto en términos reales).
EC - ¿Qué pasó con la demanda interna?
AL - Subió un 10,9%. Dentro de la demanda interna, el consumo privado mostró una suba importante de 9% en el primer semestre.
EC - ¡Nueve por ciento! Una suba importante, ¿cómo se explica?
AL - Hay que tener en cuenta varios aspectos, Emiliano. En primer lugar, la economía está transitando una fase de crecimiento que está permitiendo una recuperación importante de los salarios reales. A mediados de 2006, los salarios resultan en promedio un 4,9% más altos que a mediados de 2005. Además, estamos observando una mejora en el nivel de empleo. Esas dos cosas determinan una mejora de los ingresos de la población y por lo tanto determinan un aumento del gasto.
Por último, hay que tener presente que las cifras de consumo privado de la primera mitad del año pasado habían sido particularmente pobres, al punto que habían mostrado un descenso en términos desestacionalizados en relación al cierre de 2005. A nuestro juicio, esa situación no tenía una explicación clara desde el punto de vista económico y en ese entonces consideramos que esa diferencia podría haberse originado en problemas de medición, en tanto el Consumo es una variable que se calcula como diferencia entre las otras variables. Pero a nuestros efectos, el hecho de que las cifras del primer semestre del año pasado hayan sido tan pobres contribuye probablemente a esa suba de 9% que estábamos comentando.
EC - ¿Qué ocurre en materia de inversiones? Creo que en general todos tenemos la impresión de que está habiendo un repunte importante en esta materia.
AL - Es cierto, Emiliano. La inversión en activos fijos aumentó un 24% en la primera mitad de este año, siempre comparando contra el mismo período del año anterior.
Esa suba obedeció a un incremento de 14% en la inversión privada y a un aumento de casi 75% en la inversión pública. En este caso debemos advertir, sin embargo, que los niveles de inversión pública venían siendo muy reducidos desde la crisis de 2002. Este año se produjo un aumento importante de las inversiones públicas, siendo particularmente importante la construcción de la planta generadora de energía en San José a cargo de UTE.
EC - Alfonso, ¿cómo son las perspectivas para los próximos meses?
AL - Como señalaba Horacio el martes, a nuestro juicio la economía continuará creciendo a muy buen ritmo en los próximos meses y el año próximo. De todas maneras, la suba del PBI fue tan fuerte en el segundo trimestre que no nos debería sorprender que en el tercer o cuarto trimestre se observara una corrección puntual a la baja, en términos desestacionalizados, es decir respecto al trimestre anterior.
Contemplando esa posibilidad prevemos que el PBI suba al menos un 7% este año. No obstante, si el PBI mostrara dos subas consecutivas en los que resta del año, entonces podríamos terminar con un aumento del orden de 8%. En ese marco, deberíamos pensar que todos los componentes de la demanda agregada continuarán en expansión.
EC - ¿Qué esperan, en particular, para la inversión?
AL - En el primer semestre la inversión en activos fijos subió un 24% en términos reales y pensamos que cerrará el año con ese ritmo de expansión. En esto seguirá influyendo la reactivación de las inversiones públicas, la construcción de la planta de celulosa de Botnia, el dinamismo de la construcción en Maldonado y (en forma más incipiente) en Montevideo. Y a eso se agrega una tendencia de incorporación de maquinarias y equipos en la industria manufacturera, que como comentamos otras veces está mostrando una expansión muy sostenida.
EC - ¿Y a qué niveles en relación al PBI llegaría la inversión?
AL - Eso depende de cómo midamos la inversión. Para calcular el ratio inversión como porcentaje del PBI podemos considerar cifras a precios del año base (1983) o en términos nominales, a precios de hoy.
El tema es un poco técnico pero según que medida usemos, según nuestros cálculos la inversión total alcanzaría este año a un 16% o a un 18% del PBI. Eso supondría, en cualquiera de las dos medidas, tener niveles de inversión similares a los niveles máximos que se registraron a fines de la expansión económica de los 90.
EC - ¿Cómo quedaríamos si hiciéramos una comparación a nivel internacional?
A los efectos de las comparaciones internacionales (y aún considerando que este indicador no toma en cuenta la inversión en el desarrollo del capital humano, si nos quedamos con el promedio de esas dos cifras, una inversión del orden de 17% del PBI seguiría siendo bastante baja. Por eso, necesitamos que la inversión continúe creciendo a un ritmo muy superior al del PBI en los próximos años.