En diálogo con Daniel Castro, el presidente de la CIU habló sobre la situación de Ecolat, la relación con los sindicatos, el hecho de que el nuevo gobierno haya incorporado a varias figuras sindicales a la administración y la nueva "cultura del trabajo" que se está intentando instaurar. Asimismo manifestó su preocupación por el difícil momento actual, "hay que bajar a tierra lo más rápido posible las ideas, los tiempos de la industria no son los mismos que los del Estado".

Con respecto al tema Ecolat, el presidente de la cámara aseguró que "es un hecho que se retira la empresa. En el momento en que la empresa cumpla con sus obligaciones comerciales, financieras y tributarias puede hacer lo que quiera con sus activos".

También recordó que Ecolat es un grupo muy poderoso, "no podemos decir que vino a joder al Uruguay, porque las empresas que vienen y les va bien no se van".

Con respecto al porqué de su partida, Corallo cree que en Uruguay, "a través de algunos actores, no trataron bien a Ecolat". Para ser más especifico, aseguró que "no hubo un buen relacionamiento entre el sindicato y los patrones". La empresa "se va por varias razones, hoy los precios internacionales no son los mismos, pero la decisión es una sumatoria de hechos" agregó el presidente.

"Los sindicalistas siempre responsabilizan a las empresas, nunca hacen un mea culpa" expresó Corallo.

A entender del presidente, "hay actores que tiran de la piola, cuando el mercado no lo deja. La gestión de una empresa depende de su capacidad financiera, de su capacidad de acceder al mercado, de su relacionamiento con sus actores productivos. Los primeros que están criticando y protestando contra las empresas son algunos sindicalistas, no todos".

A lo que continuó: "para los que tienen algún concepto equivocado, hacerles entender que las empresas son las que generan los trabajos. La riqueza no se distribuye, se crea, y para eso hay que trabajar, y para trabajar hay que captar ese capital. También hay que conservarlo y para eso hay que mantener una buena relación con los proveedores y el mercado".

"Cada empresa tiene su plan de trabajo, y si sus números, por las razones que sea, no son los mismos, o no puede producir en condiciones iguales y empieza a perder dinero, la empresa puede ajustar sus necesidades de trabajo, y si eso implica prescindir de mano de obra… a nadie le gusta prescindir de mano de obra, yo quiero ocupación plena, pero quiero calidad de trabajo, no cantidad. Que el trabajo que ocupan las empresas sea redituable" agregó.

Agenda empresarial y cultura de trabajo

Corallo entiende que es necesario "dignificar el concepto de empresario".

"No piensen que nosotros, los que producimos bienes, pedimos subsidios porque no es así. Lo único que queremos son condiciones para competir en igualdad, eso es lo que pedimos" expresó Corallo, al tiempo que insistió en la necesidad de "definir reglas claras en política macroeconómica como prioridad".

El presidente de la Cámara también destacó la importancia de hablar de la cultura del trabajo, a su entender "lo más importante que está diciendo el gobierno, están hablando de derechos y obligaciones. El gobierno está preocupado por fomentar esa cultura del trabajo, y a través de sus actores está dando el ejemplo".

Fondes. "El Fondes como herramienta de gestión es muy buena, no tengo problema que administren fondos de cualquier actividad, siempre y cuando ese emprendimiento tenga una base sólida y que se asuma con los mismos derechos y obligaciones que una empresa privada" aseguró Corallo, al tiempo que agregó: "así como a las empresas privadas les exigen la capacidad de pagos, las empresas gestionadas deberían mostrar también esas capacidades".

Perspectivas. En palabras del presidente de la Cámara de Industrias, "el horizonte es complejo" pero su gestión "es trabajar al lado del gobierno, y de los funcionarios que trabajan en las empresas".

"Lo importante es que de la discusión de ideas, de la capacitaciones de los empresarios y de los funcionarios, se pueda sacar frutos. Ojo, no nos engañemos, es un momento difícil, hay que bajar a tierra lo más rápido posible las ideas, los tiempos de la industria no son los mismos que los del Estado" añadió.