En un comunicado emitido por la Unidad de Comunicación del Ministerio, luego de la reunión entre el jefe de Policía de Montevideo, Mario Layera y Bonomi, el ministro sostuvo que "las estadísticas indican un incremento importante de eventos delictivos que ocurren en el horario de relevo de los turnos de las Unidad de Respuesta Policial de Montevideo, razón por la cual era imperioso un cambio para dar respuesta a esa situación".

El comunicado agrega que la respuesta policial es nula o débil precisamente en el horario en que los ciudadanos acuden a los centros de estudios, a sus empleos o salen de sus turnos laborales.

Layera había dicho que las modificaciones de horarios en la URPM se deben a que durante los cambios de turno, aumentaba la cantidad de delitos.

Además, agregó que la Guardia Republicana y otros dependencias de la Policía trabajarán mientras las unidades de respuestas policiales hacen el relevo correspondiente.

Las URPM cumplen tareas de patrullaje y de respuestas de emergencias.

Hasta ahora los turnos policiales eran de 6 a 14, de 14 a 22 y de 22 a 6.

La nueva disposición mantiene los tres turnos, pero con cambios: de 8 a 16, de 16 a 0 horas, y de 0 de 8 de la mañana.

También los horarios de los subcomisarios fueron modificados. Hasta ahora trabajaban 24 horas y descansaban 48. Pero con los cambios, comenzarán a trabajar cinco días a la semana y descansarán uno, con horarios de ocho horas.

Según Layera, estos cambios se anunciaron hace 20 días y estarán en estudio durante 30 días y luego de cumplido este plazo se va a presentar un informe.

La nueva estrategia incluye la televigilancia y la geolocalización de los delitos para concentrar policías y adecuar el trabajo a los lugares más conflictivos de la ciudad.

Layera advirtió que con este cambio se puede producir un corrimiento del delito.

Esta nueva disposición generó molestias entre algunos sectores de la policía, que durante el fin de semana amenazaron con no salir a patrullar.

La medida colectiva afectó el inicio de los turnos matutino y vespertino de las URPM de la Zona II, afectó el patrullaje de barrios como Pocitos, Malvín, Buceo y Carrasco.

Layera agregó que una medida colectiva podría considerarse como "abandono de cargo" por lo que se tratará caso a caso y en caso de presentar problemas reales, se solucionará.

Roberto Cardozo, presidente del Sindicato Único Policial, dijo a El Espectador que están analizando la situación para saber que trabajadores se ven afectados.

Con estos cambios de horarios, algunos trabajadores se ven imposibilitados de realizar el servicio de 222 por lo que ven afectados sus ingresos.

Cardozo afirmó que el cambio había sido anunciado con anticipación.